Tiene por objeto ser una referencia metodológica en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la lectoescritura y de un segundo idioma en la etapa de infantil y primeros cursos de educación primaria de todos los centros de la FESD.
Para ello, hemos tenido en cuenta los siguientes fundamentos a la hora de confeccionar nuestro proyecto propio:
Momento madurativo
El aprendizaje de la lectoescritura no ha de realizarse antes de que el niño haya llegado a un momento madurativo adecuado (cerebro, estructura osteoarticular, motriz y de organización espacial).
Vocalización
El proceso de vocalización (lenguaje oral-habla), finaliza sobre los 6-7 años, siendo este tipo de lenguaje sobre el que aparece y se adquiere la escritura. Iniciar antes su enseñanza puede ir en contra de un aprendizaje emocionante y positivo.
Mielinización
Las estructuras cerebrales que participan en el aprendizaje de la lectoescritura completan su mielinización en torno a los 7 años, siendo contraproducente dar por finalizado su aprendizaje al finalizar la etapa de educación infantil.
Orden
Pasar de forma ordenada y correcta por todas las etapas favorece la adquisición de los prerrequisitos necesarios para el aprendizaje de la lectoescritura.
Continuidad
El proceso de aprendizaje de la lectura y la escritura se inicia en los primeros años de vida con el desarrollo del lenguaje oral y continúa durante la etapa de primaria con la adquisición del lenguaje escrito, lo que requiere de una transición amable entre infantil y primaria.
Coherencia
Ser coherentes con nuestro papel de docentes implica conocer y tener en cuenta el respeto por el momento madurativo y el ritmo al que aprenden, tal y como nos indica la neurociencia, motivo por el cual es necesaria la coordinación entre etapas para favorecer un aprendizaje adecuado.